La medicina regenerativa celular es la medicina del presente y futuro. La terapia con ondas de choque, gracias a su efecto estimulador biológico, es capaz de producir regeneración tisular, ya sea de hueso, tendón, piel, músculo cardiaco y otros que actualmente se encuentran en estudio.
Así es como un tendón lesionado por una falla en su cicatrización natural (comúnmente conocido como tendinitis, pero que actualmente el conocimiento nos ha permitido entender que corresponden a fallas de cicatrización o “tendinosis”) puede revertir su condición patológica con este tratamiento, logrando de esta forma la reparación del tendón lesionado y provocando una disminución o desaparición del dolor en el paciente. Al mismo tiempo, la falta de consolidación ósea o “pseudoartrosis”, la incapacidad de cicatrización de una herida o una úlcera por presión también son inducidos a cicatrizar gracias a este método.